Las Mejores Rutas de Senderismo con Vistas al Mar en la Costa Brava
La Costa Brava, ese rincón salvaje y encantador del Mediterráneo, es el sueño hecho realidad para los amantes de la naturaleza, los aventureros y quienes buscan desconectar junto al mar. Acantilados escarpados, calas escondidas, bosques de pinos y pueblos pesqueros pintorescos convierten a esta costa catalana en un paraíso para recorrer a pie.

Si te imaginas caminando junto al mar, respirando aire puro y descubriendo paisajes de postal, aquí te compartimos las mejores rutas de senderismo en la Costa Brava que te regalarán vistas inolvidables y momentos de pura conexión con la naturaleza.
1. Camí de Ronda (GR-92) – El Sendero Costero por Excelencia
El Camí de Ronda, conocido también como GR-92, es sin duda la ruta de senderismo más emblemática de la Costa Brava. Nació como camino de vigilancia costera, y hoy nos regala una experiencia visual inigualable: calas escondidas, acantilados, playas doradas y bosques mediterráneos.
Recomendaciones:
- El tramo entre S’Agaró y Sa Conca es fácil, corto y con vistas espectaculares.
- La ruta de Calella de Palafrugell a Llafranc es un clásico que combina naturaleza y tradición marinera.
Ideal tanto para paseantes tranquilos como para senderistas con experiencia, este camino ofrece secciones para todos los niveles.
2. Parque Natural del Cap de Creus – Belleza Salvaje y Vistas Infinitas
En el extremo noreste de la península ibérica se encuentra Cap de Creus, una zona protegida con paisajes que parecen de otro mundo. Rocas moldeadas por el viento, acantilados abruptos y el azul profundo del Mediterráneo crean una atmósfera única.
Ruta destacada:
- Desde Cadaqués hasta el faro de Cap de Creus, una caminata de unas 2 horas con vistas que te dejarán sin aliento.
Es la elección perfecta para quienes buscan naturaleza en estado puro y una experiencia que se queda grabada en la memoria.

3. Ruta al Faro de Sant Sebastià – Historia y Mar en un Solo Paseo
Cerca de Llafranc, este sendero te lleva hasta el majestuoso Faro de Sant Sebastià, situado en lo alto de un acantilado. Aunque el camino es corto, la subida es intensa y las vistas lo compensan con creces.
Lo mejor:
- Disfruta del faro del siglo XVIII y explora los restos arqueológicos cercanos mientras admiras el mar desde las alturas.
Perfecto para un paseo al amanecer o al atardecer, ideal para los amantes de la fotografía y la historia.
4. Aiguamolls de l’Empordà – Naturaleza, Aves y Tranquilidad
¿Prefieres rutas planas y llenas de biodiversidad? Entonces el Parque Natural dels Aiguamolls de l’Empordà es tu sitio. Entre Roses y L’Escala, este humedal ofrece senderos accesibles entre lagunas y campos, con una fauna que enamora.
Ideal para:
- Familias con niños, observadores de aves y caminantes que buscan paz.
- Fotógrafos de naturaleza en busca de flamencos, garzas y más de 300 especies.
Una caminata relajante que muestra otra cara de la Costa Brava, igual de mágica.
5. De Begur a Sa Tuna – Calas Secretas y Aguas Turquesas
Esta ruta de dificultad media une el encantador pueblo de Begur con la cala de Sa Tuna, uno de los rincones más bonitos de la zona. El sendero serpentea entre bosques de pinos y rocas con vistas constantes al mar.
Consejo extra:
- Extiende la caminata hasta Aiguafreda, donde encontrarás rincones perfectos para nadar y hacer snorkel.
Una opción maravillosa para desconectar, respirar aire puro y descubrir paisajes que parecen sacados de una postal.
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